Los celtas, mucho más que guerreros y druidas

Aunque los celtas gobernaron distintas partes de Europa y Asia Menor hace dos milenios, su historia continúa intrigándonos al no haber dejado rastro escrito. En Celtas. Guerreros, artistas y druidas, libro publicado por la editorial Pinolia, conocemos algunas respuestas que no te puedes perder.
Celtas. Guerreros, artistas y druidas
Istock

Originario de Europa central, el pueblo celta se construyó y organizó en un área que en la actualidad incluiría Suiza, Austria, Alemania, el oeste de Hungría, el oeste de Eslovaquia y el sur de Italia.

Su llegada se produjo de forma paulatina, cuando las tribus indígenas, denominadas "pueblos megalíticos" (y que vivían de la recolección y la caza, y eran en gran parte nómadas), se asentaron en el territorio que Julio César denominaría más tarde "Galia".

Fue a partir de ese momento cuando el mestizaje de la población entre celtas y los pueblos megalíticos se produjo de manera armoniosa, principalmente por dos factores importantes: aunque los celtas habían desarrollado una sociedad muchísimo más codificada y jerarquizada, ambos pueblos tenían un modo de vida similar y costumbres comunes.

Pero, posteriormente para los griegos, los celtas fueron "bárbaros sin interés", hasta el punto que la indiferencia general de los griegos por los bárbaros ayudó a acrecentar el enigma sobre este pueblo.

Todo ello ha influido en la aparición, a lo largo de los siglos, de ciertos estereotipos en el imaginario occidental que, en realidad, no se corresponden con lo que hoy conocen historiadores y estudiosos de la rica y vasta cultura celta. Y es aquí cuando nos encontramos con Celtas. Guerreros, artistas y druidas.

'Celtas. Guerreros, artistas y druidas', el libro ideal para conocerlos más de cerca

Fue Tácito quien dijo que «la verdad se robustece con la investigación y la dilación; la falsedad, con el apresuramiento y la incertidumbre». Lo cierto es que lo poco que conocemos sobre los celtas lo sabemos gracias a los vestigios de las excavaciones arqueológicas en el siglo XIX, los hechos relatados por griegos y romanos (cuya visión ha perdurado hasta nuestros días), y la lengua y literatura celtas, estudiadas desde el siglo XVIII al haberse conservado en zonas de Europa occidental e Irlanda.

Y, a pesar de ese desconocimiento, resulta curioso comprobar cómo todavía seguimos creyendo que los celtas eran un pueblo de personas rubias y altas, o que se pasaban el día haciendo hechizos y pócimas.

Con la finalidad de ayudarnos a conocer más de cerca a la sociedad y el pueblo celta, y poner en valor la complejidad de la sabiduría de este pueblo, la editorial Pinolia ha publicado recientemente Celtas. Guerreros, artistas y druidas, coordinado por el catedrático en Prehistoria por la Universidad Complutense de Madrid, Gonzalo Ruiz Zapatero.

A través de sus páginas descubriremos que, realmente, los celtas fueron capaces de forjar una civilización que llegó a predominar durante todo el primer milenio antes de Cristo, en la mayor parte del Viejo Continente.

Lo hace contándonos su historia desde la cultura de Hallstatt a La Tène, pasando por su asentamiento en Hispania, su imaginario religioso y todos los avances de esta singular cultura. Y poniendo en valor su saber astronómico y científico, y la calidad y belleza de su arte.

Celtas. Guerreros, artistas y druidas

25,95€

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«Todo lo concerniente a los celtas se encuentra revestido de una atmósfera irreal e irracional en todo lo conforme a la conciencia antihistórica de este pueblo. Los celtas han entrado en la historia por la puerta de la leyenda en una época en que Grecia y Roma tenían ya una historia»

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