Su presencia monumental domina el paisaje inglés desde hace milenios. Se trata del Marlborough Mound, un montículo que se emplaza en la homónima localidad del condado de Wiltshire. Con una altura aproximada de 19 metros, constituye uno de los montículos neolíticos más grandes de Europa, solo superado por el célebre Silbury Hill. Aunque su construcción se ha datado en torno al 2400 a. C., la leyenda popular afirma que bajo la imponente mole arcillosa se encuentra la tuba del mismísimo mago Merlín.
Un coloso prehistórico en el corazón de Wiltshire
El montículo, que en la actualidad se encuentra englobado en los terrenos del Marlborough College, presenta un diámetro de más de ochenta metros en su base y alrededor de treinta metros en su cima. Está compuesto tanto de capas alternas de arcilla de distintos tonos como de gravilla, dispuestas de forma compacta para asegurar así la estabilidad del conjunto. La datación del carbón vegetal hallado en los estratos confirmó su antigüedad neolítica y lo situó en un horizonte temporal similar al de otros grandes monumentos del área de Avebury.
Aunque el montículo ha sufrido alteraciones derivadas de sus múltiples usos a lo largo de la historia, su núcleo neolítico permanece íntegro, lo que lo convierte en un testimonio excepcional de las prácticas constructivas prehistóricas del sur de Inglaterra. La sola magnitud del montículo demuestra que la obra fue el resultado de un esfuerzo colectivo, concebida para perdurar y ser visible desde la distancia.

La posible función prehistórica de esta construcción colosal
La función original del Marlborough Mound sigue siendo objeto de debate. Según los investigadores, no conserva una tumba identificable ni un ajuar funerario completo. Las evidencias arqueológicas, por tanto, sugieren que su propósito pudo ser más simbólico que estrictamente funerario.
Algunas interpretaciones sostienen que pudo servir como una plataforma ritual elevada que habría hecho posible presenciar, desde la lejanía, la celebración de ceremonias. Otras hipótesis, sin embargo, apuntan a un posible vínculo con el paisaje sagrado del cercano río Kennet o con la veneración de la tierra como entidad femenina.
Su emplazamiento en un paisaje plagado de monumentos prehistóricos, que incluyen círculos de piedra, túmulos y colinas artificiales erigidos en un lapso de siglos sugiere que el montículo formaba parte de un complejo entramado ritual. En ese contexto, la monumentalidad del Marlborough Mound pudo haber funcionado como un marcador de poder y cohesión comunitaria.

La leyenda de Merlín y el lema de la ciudad
A pesar de sus raíces neolíticas, con el paso del tiempo, el montículo pasó a integrarse en el imaginario legendario británico. Según reza la tradición, el mítico mago Merlín recibió sepultura en su interior, creencia que quedó consagrada en el lema de la propia ciudad: "Ubi nunc sapientis ossa Merlini", es decir, “¿Dónde están ahora los huesos del sabio Merlín?”.
Aunque no existe evidencia arqueológica que respalde tal asociación, el mito ha contribuido de manera decisiva a forjar la identidad cultural del montículo y se ha integrado en las narraciones artúricas medievales que evocan la figura del mago como protector, consejero y encarnación del conocimiento arcano.

Un palimpsesto histórico: de castillo normando a jardín georgiano
A comienzos del periodo normando, el montículo se reutilizó como base para construir un castillo de tipo mota castral. Así, hacia finales del siglo XI se levantó sobre él una torre de madera que transformó la colina artificial en un bastión defensivo que dominaba el antiguo asentamiento medieval. Esta reutilización, si bien alteró parcialmente su aspecto, también contribuyó a preservar la integridad de su núcleo neolítico.
Centurias más tarde, ya en el siglo XVIII, la propiedad pasó a manos de la familia Seymour. Convertido ahora en propiedad privada, el montículo se integró en los jardines ornamentales de la residencia. Se añadió una gruta decorada con conchas, se habilitó una cascada y se construyeron pequeños estanques que lo dotaron de un carácter paisajístico inspirado en el gusto georgiano.
Con la fundación del Marlborough College a mediados del siglo XIX, el montículo se incorporó a los terrenos del centro educativo. Durante un tiempo, incluso albergó un depósito de agua en su interior. Cada generación, por tanto, adaptó el monumento a sus propias necesidades.

El proyecto de restauración y la conservación actual
A finales del siglo XX y comienzos del XXI, el deterioro causado por la vegetación, la erosión y las antiguas intervenciones alertó a los arqueólogos y conservadores. Para evitar ulteriores daños en la estructura, se creó una fundación destinada a preservar y restaurar el monumento. Así, se procedió a eliminar la densa capa de árboles que amenazaba su estabilidad. Además, se consolidaron los taludes, se estabilizaron las filtraciones internas y se restauraron elementos históricos, como la gruta del siglo XVIII. El objetivo principal fue garantizar la seguridad del montículo y evitar que las raíces, el peso arbóreo y la humedad deterioraran las capas internas.
Aunque Marlborough Mound está integrado en los terrenos del Marlborough College, el centro organiza visitas puntuales y actividades de divulgación que permiten conocer el monumento de primera mano. La sola experiencia de contemplar el montículo desde los alrededores ya ofrece una impresión poderosa. Se trata, pues, de una estructura que, pese a los miles de años transcurridos desde su construcción, mantiene una presencia física y simbólica que trasciende épocas, mitos y funciones.

El Montículo de Merlín: entre el mito y la arqueología
El Marlborough Mound es una obra monumental nacida de la creatividad humana en un momento en que las comunidades neolíticas ya eran capaces de transformar paisajes enteros. Reconvertido en castillo medieval, jardín aristocrático y, ahora, elemento englobado en un centro educativo, cuenta una historia de cambio y adaptación.
Su asociación con Merlín, aunque carente de base histórica, añade una dimensión narrativa que enriquece su interpretación cultural. En ese cruce entre mito y arqueología radica su encanto perdurable: el montículo es a la vez un testimonio del pasado remoto y un símbolo vivo del imaginario británico, capaz de dialogar con la ciencia, la leyenda y la memoria colectiva.
Referencias
- Davison, Peter. 2025. "Restoration plans for 'Merlin's Mound' approved". BBC News. URL: https://www.bbc.com/news/articles/cpwv44ey144o
- "The Marlborough Mound". Marlborough College. URL: https://www.marlboroughcollege.org/explore/our-history/the-marlborough-mound/
- The Marlborough Mound Trust. URL: https://www.marlboroughmoundtrust.org/