La reciente intervención arqueológica en el litoral de la comuna de Hyères, en el departamento francés del Var, ha permitido identificar una vasta necrópolis romana vinculada a la antigua colonia de Olbia. La excavación, que se ha realizado en el marco del proyecto de reordenación de la carretera RD 559, ha sacado a la luz una necrópolis de gran envergadura, datada entre los siglos I y III d.C.
Ubicada a apenas 150 metros al oeste del asentamiento urbano antiguo, esta necrópolis constituye una valiosa aportación al conocimiento de las prácticas mortuorias en el ámbito romano altoimperial. Los arqueólogos han destacado tres elementos notables: la extensión y el número de estructuras detectadas, la homogeneidad en el tratamiento funerario del cadáver —la cremación— y los rituales fúnebres que acompañaban a los difuntos.

Una necrópolis de grandes dimensiones
El área excavada abarca una superficie de unos 800 m², en la que se han identificado entre 160 y 170 estructuras directamente vinculadas a ritos de cremación. La necrópolis, de carácter monumental, acompañaba la vida cotidiana de la comunidad romana de Olbia. La magnitud del conjunto sugiere que la gestión de la muerte y el tratamiento de los difuntos formaban parte integral del tejido urbano y territorial de la colonia. Según han podido constatar los arqueólogos, el cementerio parece responder a una planificación coherente y duradera, integrada en el paisaje de la ciudad antigua.
La uniformidad del rito: la cremación como norma
La homogeneidad de las prácticas funerarias es uno de los rasgos más llamativos del hallazgo. En todas las tumbas excavadas se documenta el uso exclusivo de la cremación. Para ello, el cuerpo del difunto se colocaba sobre una pira emplazada en el interior de una fosa cuadrangular, y se rodeaba de vasijas y objetos personales destinados a acompañarlo en su tránsito hacia el más allá.
Los estratos ennegrecidos por el fuego muestran la intensidad del proceso de cremación. Los restos óseos aparecen blanqueados y agrietados por el calor, aunque los antropólogos pudieron identificarlos con claridad. En algunos casos, los huesos del cráneo y de los brazos se encontraron fuera del hueco central de la pira, mientras que los de las piernas se hallaron siempre en posición anatómica. Según el equipo de excavación, este dato indica que los difuntos se cremaron en posición articulada dentro de las tumbas-hoguera.

Los rituales funerarios tras la cremación
Una de las peculiaridades del yacimiento concierne a los gestos rituales complementarios a la cremación. Tras el consumo de la pira, algunos de los hoyos de las hogueras se reutilizaron como sepulturas. Así, se depositaron en su interior las cenizas y fragmentos óseos calcinados. En otros casos, sin embargo, se extrajeron los restos para colocarlos en fosas o urnas.
La mayoría de las tumbas incluyen un elemento particularmente singular: un conducto de libación, destinado a verter líquidos —vino, hidromiel o aceites perfumados— como ofrenda al difunto. Construidos con fragmentos de ánforas, estos conductos muestran una continuidad ritual en la relación entre vivos y muertos, pues permitían mantener el vínculo simbólico con los ancestros mediante libaciones periódicas. Junto a estos elementos, también se han hallado recipientes de vidrio, piezas de cerámica y pequeños objetos de bronce depositados intencionadamente.

Arquitectura funeraria y simbolismo
El estudio de las tumbas muestra una notable variedad arquitectónica. La mayoría de las fosas son rectangulares y presentan una cavidad adicional que se utilizó para la ventilación del fuego. Esta característica, poco habitual en la zona de Var, pero más frecuente en la región de Narbona, sugiere posibles contactos o influencias culturales entre las diferentes áreas del mundo romano.
Una vez consumidas las hogueras de cremación, muchas de las tumbas se cubrieron con techumbres de tejas planas y semicirculares. Sobre estas cubiertas, se construyó el conducto de libación, visible en superficie. Esta característica parece indicar que las tumbas se diseñaron como estructuras duraderas, destinadas a ser visibles en el paisaje.
El conjunto funerario de Olbia muestra, por tanto, una intencionalidad tanto ritual como arquitectónica. Las sepulturas se integraron en el territorio de un modo que reconocía la presencia de los difuntos en el entorno de la ciudad.
La relación entre ciudad, territorio y muerte
Desde el punto de vista histórico y urbanístico, Olbia, fundada por los colonos griegos de Massalia hacia finales del siglo IV a.C., continuó habitada sin interrupción hasta mediados del siglo VI d.C. En el momento en el que se usó la necrópolis de cremación, la ciudad formaba parte de la colonia romana de Arlés, que controlaba buena parte del litoral desde la Camarga hasta Hyères.
La ubicación de la necrópolis, emplazada junto a una vía costera y a escasa distancia del mar, sugiere una articulación fluida entre el espacio funerario, el tránsito marítimo y la vida urbana. El cementerio, por tanto, se habría integrado en el paisaje portuario y en las rutas que conectaban Olbia con otras ciudades del litoral. Según los estudiosos, la muerte, en este contexto, compartía espacio con las actividades comerciales y marítimas que sostenían la prosperidad de la colonia.
Este panorama invita a reconsiderar las fronteras entre la ciudad y la periferia, el ritual y la economía, la vida y la muerte en el mundo romano del Mediterráneo. Las tumbas de Olbia muestran que los espacios funerarios, además de lugares de descanso eterno, también fueron territorios simbólicos donde la comunidad expresaba su identidad, su memoria y su pertenencia.

Un testimonio único del mundo romano provincial
La excavación de la necrópolis de Olbia representa uno de los hallazgos más relevantes del Mediterráneo occidental reciente. Más de 160 tumbas de cremación, una arquitectura funeraria singular y una estrecha relación con el mar conforman un conjunto que ilumina las costumbres funerarias romanas.
El estudio de la necrópolis de Olbia ofrece una oportunidad excepcional para comparar las prácticas funerarias romanas del sur de la Galia con las de otras regiones mediterráneas. La uniformidad del rito de cremación, la presencia de conductos de libación y la complejidad arquitectónica de las tumbas demuestran una rica hibridación entre las tradiciones locales y las costumbres imperiales.
Referencias
- 2025. "Pratiques funéraires dans la nécropole antique d'Olbia à Hyères (Var)". INRAP. URL: https://www.inrap.fr/pratiques-funeraires-dans-la-necropole-antique-d-olbia-hyeres-var-20349